Hidrología en Suprema Corte . 67491 . 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . 11 . 12 . 13 . 14 . 15 . 16 . 17 . . 69518, 519, 520 . 18 . 19 . 20 . 21 . 22 . 23 . 24 . 25 . 26 . 27 . . 70751 . 28 . 29 . 30 . 31 . 32 . 33 . 34 . 35 . 36 . 37 . 38 . 39 . 40 . 41 . 42 . 43 . 44 . 45 . 46 . 47 . 48 . . 71368 . 50 . 51 . 52 . 53 . 54 . . 71413 . 55 . 56 . 57 . 58 . 59 60 . . 71445 . 55 . 56 . 57 . 58 . 59 . . 71516 . 60 . 61 . 62 . 63 . 64 . 65 . . 71520 . 66 . 67 . 68 . 69 . 70 . . 71521 . 71 . 72 . 73 . 74 . 75 . . 71542 . 76 . 77 . 78 . . 71614 . 79 . 80 . 81 . . 71615 . 82 . 83 . 84 . 85 . 86 . . 71616 . 87 . 88 . 89 . 90 . 91 . . 71617 . 92 . 93 . 94 . 95 . 96 . . 71618 . 97 . 98 . 99 . . 71619 . 100 . 101 . 102 . . 71413 . 103 . 104 . 105 . 106 . 107 . . 71743 . 108 . 109 . 110 . . 71808 . 111 . 112 . 113 . 114 . 115 . . 71848 . 116 . 117 . 118 . 119 . 120 . . 71857 . 121 . 122 . 123 . 124 . 125 . . 71908 . 126 . 127 . 128 . 129 . 130 . 131 . . 71951 . 132 . 133 . 134 . 135 . . 71936 . 136 . 137 . 138 . 139 . 140 . . 72048 . 141 . 142 . 143 . 144 . 145 . . 72049 . 146 . 147 . 148 . 149 . 150 . . 72089 . 151 . 152 . 153 . 154 . 155 . 156 . . 72404 . 157 . 158 . 159 . 160 . . 72405 . 161 . 162 . 163 . 164 . . 72406 . 165 . 166 . 167 . 168 . 169 . . 72512 . 170 . 171 . 172 . 173 . 174 . 175 . 176 . 177 . 178 . 179 . 180 . 181 . 182 . 183 . 184 . 185 . . 72592 . 186 . 187 . 188 . 189 . 190 . . 72832 . 191 . 192 . 193 . 194 . 195 . . 72994 . 196 . 197 . 198 . 199 . 200 . . 73038 . 201 . 202 . 203 . 204 . 205 . . 73114 . 206 . 207 . 208 . 209 . 210 . . 73147 . 211. 212 . 213 . 214 . 215 . . 73406 . 216 . 217 . 218 . 219 , 220 . 45090 CABA . 221 . 222 . 223. 224 . 225 . 226 . 227 . 228. 229 . 230 . . 45232 CABA . 231 . 232 . 233 . 234 . 235 . 236 . 237 . 238 . 239 . 240 . 16191 CABA . 241 . 242 . 243 . 244 .245 . . CCF4817 . 246 . 247 . 248 . 249 . 250 . . CSJN . 251 . 252 . 253 . 254 . 255 . 256 . 257 . 258 . 259 . 260 . 261 . 262 . 262 . 264 . 265 . . 35889 patrimonios rurales 266 . 267 . 268 . 269 . 270 . 271 . 272 . 273 . 274 . 275 . 276 . 277 . 278 . 279 . 280 . . hidrolinea . . código 1 . 2 . . cartadoc fiscalFed . . cartadoc JuzgFed . . Cartadoc Scioli . . Cartadoc Massa . . acceso al habitat . . nuevo paradigma 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . . esacasoelagua . . interlocucion 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . . . dragados . . tolosa 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . . Ley 25688 . 1 . 2 . . discurso . . Ley particular . . decreto1069 . . ocsa . . dominios públicos . 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . . index .

La mejor calidad ambiental

Resumen de aprecios

En un reciente reportaje Sergio Massa preciaba a Tigre como el municipio con la mejor calidad ambiental. No sabría estimar si esta frase responde a piadoso autoengaño o a ya estar disparando para adelante para que la realidad no le alcance y lo deje paralizado.

Sin importar demasiado el caso, pues de hecho a todos les está pasando lo mismo, habremos de considerar que la ecología de los ecosistemas no es el fuerte de los políticos. Tampoco de sus asesores, que si fueran buenos y lo confesaran, saldrían despedidos, pues no hay tiempo en la política sino para gambetear con cortoplacismos.

Sin embargo, en Tigre se aplicaron 3 años a redactar una normativa con lo que imaginaron sería una novedad en materia de planificación. Y si no alcanzó fue porque nunca confesaron la paupérrima preparación crítica básica que cargaban para esta tarea y sólo se ocuparon de contratar al que les asegurara un discurso para que todo siguiera el curso de sus sueños.

En el camino se encontraron con algunas piedras y ya esos sueños no contarían con el beneficio de las cavas criminales; ni las acciones judiciales se limitarían a los acotados amparos de endeble estructura específica expositiva, aunque de sobrada elocuencia adjetiva procesal para que el juez entendiera algo general que nunca habría de llegar lejos en especificidades que a todos, incluídos los jueces, parece complicarles la Vida

En una metrópoli que crece sin parar y cuya única estructura es prolongar la linea de la traza colonial para acreditar un orden, no es la política la responsable de estas cegueras, sino la falta de integración de un urbanismo famélico afin a los negocios, con una ecología de ecosistemas que aún no es reconocida en la más mínima luz de sus albores.

De qué sirve hablar de ecosistemas sin hablar de sus gradientes y correspondientes enlaces. Materias que hoy pretenden resolver con el ojo mecánico que complace a tantos planos laminares de la técnica y la ciencia.

La transición a estos necesarios enriquecimientos reconoce compromisos que hacen su marcha mucho más lenta que lo que éste que suscribe quisiera imaginar saludable. Quien tenga la suerte de advertir esos atrasos gana una valiosa delantera, aún cuando le toque cargar soledad.

Volviendo a nuestro Querido Sergio Massa, me toca en suerte sentir que su municipio carga los mayores desastres ambientales y no precisamente por obra de las gracias naturales, sino por atropellos y cegueras de larga data. De tan larga data que es inútil querer buscar responsables, pues ya partieron y por otra parte, de nada serviría aplicarse a buscarles condena, salvo para aprender algo en procesos judiciales que también tienen todo para aprender.

El trabajo que avisoramos es infinito. No obstante ello, en este viejo que no busca encontrar premios sino, abrir senderos, sólo cuentan esos tramos que cada día en sueños le descubre su Musa y a ellos se aplica.

El municipio de Tigre en sus aprox. 13.000 Has continentales carga en las variadas materias de las aguas una montaña de problemas infernales; a la que intenta tapar persiguiendo una montaña de ilusiones bien desmesuradas en las vecinas 22.300 has de áreas insulares. Ilusiones que reclamarían mucho antes, enriquecer miradas para lograr ser bastante más serios en las proyecciones de desarrollos que hoy marchan de la mano de ambiciones con escaso o ningún otro freno que no sea judicial. (Por aquí va nuestra ayuda)

Estos complejos escenarios, aún alcanzando vastas proyecciones, no representan ni el 1% de todo lo que tienen para descubrir relacionado y muy comprometido en sus mediaciones dinámicas con el frente que sigue en el estuario y al que cabe empezar a descubrir, repito, cuáles fueran sus obligados servicios, compromisos y provechos.

A la atención de esos horizontes hube dedicado un video de 2 horas, que no son sino un chispazo de una luz que tiene que quedar encendida y sostenida en la atención de quienes quieran imaginar esos provechos. Provechos que exceden lo particular, pues resultan fundamentales para empezar a resolver los encierros que carga la gran ciudad en mil aspectos; desde ventilaciones y franjas de expansión, hasta depósitos de RSU, efluentes, puertos, balnearios y aeropuertos.

Por ello deseo, que este hombre a quien aprecio, tenga tiempo para detenerse a mirar estas cuestiones; y así como ha dedicado tres años a urdir un plan de ocupación insular de la mano de sus sueños constructores, tenga la intuición de ordenar sus pensamientos en función de otros valores, mayores compromisos, mayores riesgos y por ello obligado a prestar mayores atenciones; estando hoy a un paso de intuir proyecciones que ahora es el tiempo de comenzar a construir

De todos los esfuerzos anteriores no he dejado capítulo sin observar y demandar. Pero esto no me indica mal de amores, sino frutos del dejarse llevar por comunes ambiciones. Comunes, torpes y gratuitas. Pues que el Tigre tenga 22.300 Has más para complicarse la Vida, no cambia la historia de los despistes; que por falta de miradas críticas, siguen siendo gratuitos.

Si Sergio Massa fuera algún día a ocupar el más alto cargo ejecutivo ya tiene la oportunidad de empezar a reconocer el valor de enlazar las zonas insulares con otras metas de progreso. Repito, lo que han urdido para estas áreas, amén de torpe e ilegal en unos cuantos aspectos que van aclarados en la demanda I 72512 en SCJPBA y en mi participación como 3º en la causa 31054 en el JCA Nº1 de SI, no representa ni el 1% de todo lo que imagino bastante sencillo de descubrir si sus asesores no fueran tan ciegos.

El día que descubran esos horizontes será sólo para empezar a considerar con equipos muchos más aguerridos y menos complacientes estos temas, que no empiezan por las compatibilidades con los paladares comerciales, sino con miradas bastante más comprometidas y no menos originales con los ecosistemas y ecologías que nunca han acertado a enriquecerlas en profundidad y mucho menos, en sinceridad. Materia esta última por completo ajena a la política.

No se necesita dinero para comenzar a preparar una mochila que fuera propia de estadista; se necesita un pequeño grupo de allegados y no tan allegados que carguen abundante espíritu crítico y adviertan que hay una tarea para hacer y en adición, soberanamente buena.

Hace al menos dos años sugerí a Julio César Zamora esta propuesta. Creyeron que con la Fundación Metropolitana había otras garantías. Al menos éstas encontrarían claras correspondencias marketineras. Tan marketineras que le han dejado a Sergio Massa el regalo de que su municipio fuera el que mayor cuidado ambiental luce en la región metropolitana.

Sin embargo, es un producto que tiene la particular trascendencia de regalar la mayor desatención a todos los problemas que carga el área continental, y que en inestimable medida depende de correcciones que cabe comenzar a realizar en aguas insulares para aliviarlos

Cuenta este equipo de la Fundación Metropolitana con la ceguera profesional suficiente para proyectar transformaciones urbanas en áreas insulares de superlativa fragilidad, con la menor experiencia imaginable en ecología de ecosistemas.

Vacío que suponen resuelto con maquillaje lingüístico en la expresión “transparencia hidráulica”. Ligereza que ya mensurarán en la presión de impugnaciones judiciales, en la cuenta de la falta de preparación específica y correlativa sinceridad para haber soslayado su trascendencia primaria y medular.

Profesionales que nunca en su Vida han dedicado un minuto de atención a las dinámicas horizontales de estos ecosistemas y a una ecología que conceptualice el valor de enlaces y gradientes y a cómo operan en estas llanuras extremas. Incluyo a los profesionales del laboratorio de humedales de la UBA.

Y que en materia de otro tipo de enlaces, posterior pero igualmente obligada: los interjurisdiccionales, advertimos que cabe empezar a considerarlos desde Campana hasta Puenta Piedras. En esta mínima extensión, repito, cabe considerar los compromisos de estos ecosistemas.

Las miradas locales que el Plan Territorial del Tigre echa a sus 22300 Has es prueba concreta de que no miran por enlaces ecosistémicos.

Hablar de sistemas aislados no es hablar de ecosistemas; pues todos los ecosistemas tienen su Vida sostenida en sus enlaces.

Quien habla de ecosistemas y no habla de enlaces concretos, es un simple ... aunque cobre importantes honorarios. El día en que empiecen a escucharse discursos sobre gradientes y enlaces termodinámicos e hidroquímicos, festejaremos esas trascendencias; que por tan ausentes hoy se ganan todo tipo de reclamo judicial, para que aún sin deseos, tengan oportunidad de mirar.

El urbanismo que proyecta el transporte de los habitantes y olvida el intercambio y transporte de las energías entre ecosistemas, pertenece al medioevo. Dirán que todo es importante. A eso respondo que el orden de los factores es lo que va primero; y de su reconocimiento y respeto depende el imprescindible progreso que todavía hoy elude el urbanismo del medioevo, que sigue insistiendo en resolver sus problemas, sólo con marketing nuevo.

Imaginar que un ecosistema de éstos, en planicies de tan sólo 2 mm de pendiente por Km se mueve por "transparencia hidráulica", sin siquiera recordar que no hay ciencia hidráulica que valga 2 céntimos con estas pendientes, pues hasta el propio Isaac Newton hoy se moriría de vergüenza de seguir engañando al prójimo modelando allí extrapolaciones de energías gravitacionales.

Estos endemoniados recursos que descubre en la imagen superior el Amazonas, responden a la necesidad e irremplazable valor de las baterías convectivas acercando de mil formas los interminables recursos de captura y transferencia de energía solar que se gestan en las zonas aledañas, para asistir las dinámicas horizontales de las sangrías mayores.

Que desde plantas acuáticas, esteros, meandros, costas blandas, bordes lábiles y los propios sedimentos, se ocupan de almacenar y acercar su labor.

En el caso del Amazonas, esos recursos superan con creces a toda la energía que el hombre consume en el planeta. Y sin embargo, la ciencia hidráulica -incluídas las famosas transparencias del banquero Del Piero-, no da la más mínima cuenta de su existencia en desarrollos que sumen siquiera dos palabras. Y que por cierto, no son éstas de "transparencia hidráulica" .

En ese limbo seguimos imaginando escapes hacia un adelante que no reconoce otros respaldos que los mismos catecismos mecánicos del medioevo

Ver video de 2 horas sobre estas proyecciones de compromisos ecosistémicos por http://www.alestuariodelplata.com.ar/prospectivas4.html

Ver por /incorte93.html el fallo de 1ª instancia y el de Cámara spbre la demanda de la Fundación Pro Tigre.

Ver por /incorte95.html la presentación de éste que suscribe, como 3º a esta causa 31054 de la Fundación Pro Tigre.

Ver por /incorte94.html la causa I 72512 en SCJPBA demandando por la inconstitucionalidad del Plan de Ordenamiento Territorial propuesto por el municipio de Tigre.

Francisco Javier de Amorrortu, 1º de mayo del 2013

Aprecio poner marco de contención y esperanza a los esfuerzos de unos y otros, en estos del poeta argentino Francisco Luis Bernárdez. 1900-1978

                                         SONETO
                            Si para recobrar lo recobrado
                               debí perder lo perdido,
                            si para conseguir lo conseguido
                            tuve que soportar lo soportado,

                            si para estar ahora enamorado
                           fue menester haber estado herido,
                            tengo por bien sufrido lo sufrido,
                           tengo por bien llorado lo llorado.

                        Porque después de todo he comprobado
                           que no se goza bien de lo gozado
                           sino después de haberlo padecido.

                        Porque después de todo he comprendido
                           que lo que el árbol tiene de florido
                             vive de lo que tiene sepultado


                                    ESTAR ENAMORADO

Estar enamorado, amigos, es encontrar el nombre justo de la vida.
Es dar al fin con la palabra que para hacer frente a la muerte se precisa.
Es recobrar la llave oculta que abre la cárcel en que el alma está cautiva.
Es levantarse de la tierra con una fuerza que reclama desde arriba.
Es respirar el ancho viento que por encima de la  carne se respira.
Es contemplar desde la cumbre de la persona la razón de las heridas.
Es advertir en unos ojos una mirada verdadera que nos mira.
Es escuchar en una boca la propia voz profundamente repetida.
Es sorprender en unas manos ese calor de la perfecta compañía.
Es sospechar que, para siempre, la soledad de nuestra sombra está vencida.

Estar enamorado, amigos, es descubrir dónde se juntan cuerpo y alma.
Es percibir en el desierto la cristalina voz de un río que nos llama.
Es ver el mar desde la torre donde ha quedado prisionera nuestra infancia.
Es apoyar los ojos tristes en un paisaje de cigüeñas y campanas.
Es ocupar un territorio donde conviven los perfumes y las armas.
Es dar la ley a cada rosa y al mismo tiempo recibirla de su espada.
Es confundir el sentimiento con una hoguera que del pecho se levanta.
Es gobernar la luz del fuego y al mismo tiempo ser esclavo de la llama.
Es entender la pensativa conversación del corazón y la distancia.
Es encontrar el derrotero que lleva al reino de la música sin tasa.

Estar enamorado, amigos, es adueñarse de las noches y los días.
Es olvidar entre los dedos emocionados la cabeza distraída.
Es recordar a Garcilaso cuando se siente la canción de una herrería.
Es ir leyendo lo que escriben en el espacio las primeras golondrinas.
Es ver la estrella de la tarde por la ventana de una casa campesina.
Es contemplar un tren que pasa por la montaña con las luces encendidas.
Es comprender perfectamente que no hay fronteras entre el sueño y la vigilia.
Es ignorar en qué consiste la diferencia entre la pena y la alegría.
Es escuchar a medianoche la vagabunda confesión de la llovizna.
Es divisar en las tinieblas del corazón una pequeña lucecita.

Estar enamorados, amigos, es padecer espacio y tiempo con dulzura.
Es despertarse una mañana con el secreto de las flores y las frutas.
Es libertarse de sí mismo y estar unido con las otras criaturas.
Es no saber si son ajenas o si son propias las lejanas amarguras
Es remontar hasta la fuente las aguas turbias del torrente de la angustia.
Es compartir la luz del mundo y al mismo tiempo compartir su noche obscura.
Es asombrarse y alegrarse de que la luna todavía sea Luna.
Es comprobar en cuerpo y alma que la tarea de ser hombre es menos dura.
Es empezar a decir siempre y en adelante no volver a decir nunca.
Y es además, amigos míos, estar seguro de tener las manos puras.

 

Acerco un par de imágenes de áreas que un poco más al Sur nos recuerdan duras jornadas. La 1ª es del arroyo Gato, aquel que en La Plata el 2 de Abril del 2013 ganara fama. Aquí en su estado natural -y no canalizado o entubado- (transparencia hidráulica), en imagen de Mara Rodríguez.

La siguiente da cuenta de su salida por la Ensenada de Barragán en imagen de Javier González. Y una ulterior del mismo lugar de Mario Lena. Sean inspiradoras estas imagenes de la serenidad de alma que sólo con los años se alcanza para abrir senderos -y cuanto más largos y extensos, mejor-, sin preocuparse por premios.

Con aprecios a Sergio, a Julio y a todos los jóvenes. Francisco . 5/5/13